1971

 AÑO 1971

5 de enero de 1971. (H. 160).

J La Iglesia es, sigue y seguirá siendo santa. No se le puede echar la responsabilidad de la imperfección de algunos de sus miembros.

La Iglesia quiere la paz, la alegría, el bien de las almas, el triunfo del Santo Amor en los corazones.

La Iglesia entera canta un himno de agradecimiento a la gloria de su Creador. Es la Imagen de la Sabiduría. Vive en el Corazón de su Dios. Nada puede mancharla, pues no pertenece a los hombres; a ellos solos pertenece el error.

No se debe jamás poner en duda la santidad de la Iglesia. Sólo la incapacidad de algunos de sus miembros puede y debe ser corregida.

13 de enero de 1971. (H. 162).

J    Acordaos de Sodoma y Gomorra.

El rocío de mi gracia se derrama vanamente sobre tierras incultas.

Rezad, rezad para que se apacigüe mi enojo.

Mis fieles, que vuestra caridad cure las llagas de este mundo pervertido.

        Por vosotros, hijos míos, aplazo el día; pero, sin embargo, no eximo de él ni al    mundo, ni a lo que le pertenece.

23 de enero de 1971. (H. 163). A las almas pequeñas:

J    Vuestro Dios está buscando a su pueblo, pero éste se esquiva.

Ábreme el camino de los corazones para que venga a establecer en ellos mi reino de amor, por la justicia y la caridad.

30 de enero de 1971. (H. 163).

J   Hace falta tanto amor para vencer el mal, y tanta misericordia para mantener en jaque a mi justicia.

7 de febrero de 1971. (H. 163).

J   La naturaleza destruye y regenera. ¿Cuánto más puede, pues, el Dios de toda bondad, puesto que la naturaleza entera le pertenece y le obedece?

En verdad te lo digo, hija mía; el mundo se destruye a sí mismo, liberando las tuerzas del mal.¿Será salvado por su arrepentimiento?

¿Quién sabe hasta dónde puede llegar mi gracia? Si yo soy bueno, también sé castigar. Cuando el mal es profundo, la llaga es más dolorosa. Hay que sufrir para curar. Que el sufrimiento se haga fuente de Sabiduría y de Luz para las almas que están en las tinieblas del pecado. Yo soy la Luz del mundo.

Las tinieblas ocultan su corrupción, pero los ojos del Señor exploran sus corazones, escudriñan sus almas y conocen sus males, no siempre para condenar, sino, sobre todo, para reprender y corregir. . 23 de febrero de 1971. (H. 165).

J   El Amor te ha elegido, el Amor te ha ungido.

      Lo Verdadero es un árbol que lleva buenos frutos. Lo Falso es también un árbol, pero lleva frutos venenosos. Por sus frutos se reconoce el árbol. Pasa lo mismo con toda obra buena y fecunda, nacida en el Amor.

En verdad te lo digo: yo soy y sigo siendo el INMUTABLE, el VERDADERO, el UNICO.

Sólo el hombre cambia, puesto que no reconoce a su Dios.

8 de marzo de 1971. (H. 168).

J   En tu corazón abierto a todos, yo les espero a todos. He elegido esta vía para ti, porque por medio tuyo, como eres tan pequeña, yo puedo alcanzarles.

9 de marzo de 1971. (H. 168).

M   Señor, ¿dicen que el temor es el principio de la Sabiduría? .

J      Tú lo dices y es verdad. Pero no poseen este temor.

M     Jesús mío, tú que lo puedes todo, dales este temor de los hijos de Dios. De ah í    nacerá   el arrepentimiento y la conversión.

J    Hija mía, no intervendré, pues -te lo digo- no hay peor sordo que el que no  quiere oír, ni peor ciego que el que no quiere ver. Tienen oídos para oír, ojos para ver.

      Así como el sol brilla para todos, también la Luz es para todos.

Yo les traigo la salvación por el Amor, y no cesan de ultrajarme. Mi cariño encuentra la ironía y el desprecio. Las pasiones devoran a las almas y las esclavizan. Y yo pienso con tristeza en mi Sangre derramada inútilmente para muchos.

El gusano está en el fruto. Hay que destruirlo a fuerza de abnegación y de amor. Es el amor que salva, y su sucedáneo pierde las almas dedicadas a su culto.

15 de marzo de 1971. (H. 168).

J   Yo soy tu pasado, tu presente y tu futuro.

Vive en el agradecimiento de los dones recibidos. Confía en M í y que nada te desvíe de tu fe. Las gracias se merecen y la oración fervorosa y confiada las consigue.

Que vuestro esfuerzo no decaiga. Tended hacia la meta con todas vuestras fuerzas. Esta meta soy Yo, vuestro Dios, y yo soy vuestra recompensa. Si me amáis conseguiréis todo de Mí.

La vía de las almas pequeñas es un camino regio por donde se encaminan mis salvados.

Salvados por vuestra generosidad. Pero ya os lo dije, el mundo está todavía lejos de la Verdad y de la conversión. Que vuestra alegría sea la de servirme, de amarme y de hacerme amar a vuestro alrededor.

Imponeros al mundo con vuestra modestia y vuestra humildad.

Yo corono y autentifico mi Obra con la obtención del imprimátur para tranquilizar las conciencias a las que su falta inquietaba. La Iglesia reconoce mi voz, y hoy repito estas palabras: "una flor ha nacido en mi Iglesia". 8 de abril de 1971. (H. 170).

J    Porque eres humilde, te doy mi amor. Claro que

tienes defectos, pero tu pequeñez puede borrarlos de delante de mi Rostro. Y no queda en M í más que mi Corazón para amarte, mi brazo para protegerte y mi Espíritu para fecundar el tuyo.

Todo está dicho, hija mía, y todo está hecho. Los frutos de mi misericordia serán numerosos.

Mi sufrimiento os ha salvado, a vosotros que me amáis y que reconocéis en M í vuestro Salvador. ¡Ay! ¡Cuántas pérdidas hay que lamentar!.

15 de abril de 1971. (H.171).

Visita de Jesús.

17 de abril de 1971. (H. 171).

Visita de Jesús.

19deabrilde1971. (H.171).

J  Si la cruz pesa sobre el mundo, ¿quién tiene la culpa sino vosotros, hijos de los hombres, tan amados por vuestro Dios y tan poco deseosos de serio?

20 de abril de 1971. (H.. 172).

He recibido esta tarde la explicación de las palabras misteriosas del 17 de octubre de 1966:

J   Humilde florecita, escondida en tan buen lugar (en el Corazón de Dios), otras como tú, morando en este lugar (el Corazón de Dios es la morada común de todas las almas pequeñas), te descubrirán (misión de amor de Margarita) y te acogerán (apoderándose de las lecciones del Mensaje). Ellas sacarán de ti toda la savia que te alimenta (la búsqueda de Dios). Por mi gracia, ésta (la Savia) se renovará y las colmará eternamente. (En Marga- rita, la gracia es fuente inagotable: es un amor difusivo que llena las almas).

21 de abril de 1971. (H. 173).

J   Lo que yo te he dado liberalmente, lo has colocado a cien por cien en el Banco del Amor; y tu riqueza (Yo, tu Dios) atrae las almas hacia ti, donde me descubren y donde se alimentan en Amor. Pero tu tesoro es inagotable. Da a manos llenas, hija mía, a quien te pide.

Enséñame a las almas, ámalas en mi Nombre. Me agrada manifestarme en tu corazón humilde y fiel.

Ve con mis ojos, ama con mi Corazón, actúa con mi Espíritu. Y que mi amor sea tu Luz y la luz de todas las almas que te la piden. Sé sumisa y confiada.

Mi Obra dará la vuelta al mundo.

Noche del 23 al 24 de abril de 1971. (H. 174). Visita de Jesús.

25 de abril de 1971. (H. 174). Presencia muy sensible y visita de Jesús.

J      Enseña a las almas a rezar, a ofrecer, a OBEDECER.

Enséñales el respeto de los valores divinos y humanos.

Diles que no se engaña a Dios, pues Ellas conoce mejor que ellas a sí mismas.

26 de abril de 1971. (H. 175).

M   Jesús mío, hazme generosa a tu servicio.

J      Hija mía, la generosidad se aprende en la escuela del Amor.

M    Te amo tanto, Dios mío. Haz que te ame cada vez más, para darte más a las  almas.

J   Tu fe es la antorcha del Amor. La caridad es amar sin límite. La esperanza es  esperar lo imposible y creerlo posible. Conserva lo que es bueno.                                                                         

 

2 de mayo de 1971. (H. 179).

J Pide a mis sacerdotes que renueven a mi pueblo en el Amor y en la Verdad.

      El sacerdote lleva la marca de su Dios; ella es indeleble; y esto le da derecho al mayor respeto de parte de todos mis hijos.

      El error y la infidelidad de algunos miembros de la Santa Iglesia no pueden     borrar la huella con que el Señor marcó su alma.

Rezad con gran caridad por vuestros sacerdotes sometidos a terribles tentaciones. Almas mías pequeñas, oponed vuestra fidelidad y vuestro amor a las fuerzas del mal que sumergen al mundo con sus herejías.

        Actualmente unos ciegos conducen a otros ciegos. Ellos han perdido el   sentido de las realidades sobrenaturales, y el hombre ha llegado a ser un dios para el hombre. Adoran lo que deberían quemar. Sutilmente matan a Dios en las almas.

 El Amor tiene antenas que captan las ondas del mal y las destruyen.

 Pero aquel que no posee el Amor está perdido.

5 de mayo de 1971. (H. 176).

J   Si la fe puede transportar las montañas, el Amor puede levantar el mundo. El  Amor   salva y santifica.

Hay que enseñar de nuevo a los hombres a amar y a confiar en su Dios.

Hay que volver a colocar al hombre en su puesto y devolver a Dios el sitio que aquél le usurpó en su orgullo. Tiene que reconocer mis derechos y su dependencia de Mí.

Deseo FIRMEZA, HUMILDAD y MUCHO AMOR de parte de los que están encargados de conducir a mi pueblo. Sin amor, nadie puede ser salvado.

Yo soy la Fuente. Venid a M í todos vosotros que sufrís y que buscáis vanamente la Luz, y os saciaré.

Apartad vuestra mirada de las cosas vanas y frívolas; no se encuentra ahí la felicidad para vosotros. Acordaos más de vuestra felicidad eterna. Volveos hacia Mí. YO SOY LA VIDA.

Tomad conciencia de mi Presencia en vosotros. Hijos de los hombres, el orgullo destroza vuestras almas. El vicio y la corrupción mandan.

Es hora de recobrar el dominio de vosotros mismos y de pensar en vuestras responsabilidades ante Mí. Mi Mensaje es un mensaje de Amor y de misericordia. Temed que no se transforme para vosotros en causa de perdición, si rehusáis de    captar su alcance y de corresponderle con vuestra enmienda.

   Hija mía, tu misión está trazada, es la vía del Amor y del abandono. Síguela sin flaquear para el consuelo de las almas que yo te mando, para expiar los agravios y para que se haga la Luz.

10 de mayo de 1971. (H. 181).

El alma está hecha para el Amor. Si rehúsa someterse a su ley, va en contra de la naturaleza, Y entonces se producen en ella unos desarreglos graves que pueden causar su perdición.

12 de mayo de 1971. (H. 181).

El viento de locura que pasa sobre el mundo tiene que ser barrido por el soplo del Amor. Habla y reprende en mi Nombre para el mayor bien de las almas.

 

J ¿Por qué, pues, descargas sobre otros lo que debes realizar tu misma?

24 de mayo de 1971. (H. 182).

J   El sacerdote no debe ser un hombre del mundo, sino, ante todo, un hombre de Dios.

Por su conducta debe merecer el respeto que se le debe en su calidad de sacerdote y que muchos han perdido por su culpa. Los fieles deben reconocer en él mi autoridad, pues de M ( tiene el poder de hacer y de deshacer.

El sacerdote puede salvar al mundo, pero también puede perder las almas si le falta la santidad.

Deseo y pido a mis sacerdotes unas ceremonias penitenciales para expiar los pecados que no cesan de ultrajar mi divino Corazón.

El sacerdote tiene poder sobre las almas solamente en la medida en que se mantiene en el lugar designado por su Creador: no un INNOVADOR, sino un CREADOR de santidad por su ejemplo; disponible, a todas las horas del día y de la noche, para las almas que yo le confío y que él debe conducir hasta Mí. Su santidad debe ser    contagiosa y ganar el mundo entero.

Que se aparte de los artificios del mundo para dedicarse a lo que espero de él.

El papel del sacerdote es grande. Debe tomar conciencia de su responsabilidad y del poder que tiene de Mí.

El sacerdote no debe sustituir a Dios en un alma, sino hacer lo que Dios le manda hacer para que esta alma abra su corazón al Amor.

Representante del Señor, su Dueño, tiene que darse cuenta que no puede nada sin El.

J    La convicción se adquiere a la Luz de la Fe.

Las almas propensas a la virtud reconocen mi Palabra.

2 de junio de 1971. (H. 184).

J   Hija mía, tú vas en nombre de Jesús-Amor. Ahí está tu misión.

Lleva al mundo mi Paz y mi deseo de salvarle.

5 de junio de 1971. (H. 185).

     Ten siempre gran respeto para las manos consagradas del sacerdote, cualquiera que sea. Incluso si, por su conducta, debiera llevar Mi Sacerdocio al infierno, sigue siendo mi Sacerdote para siempre. La dignidad que le he concedido no le será arrebatada jamás. Pero yo lo repito: más le hubiera valido no haber nacido.

9 de junio de 1971. (H. 186).

  J   Hija mía, un alma pequeña sufre por su Amado y con El.

Tienes que sufrir para cuidar cariñosamente de los que yo te mando. Pero tengo compasión de tu debilidad, y te digo en verdad: si hay espinas, hay también rosas.

Nadie mejor que Yo conoce el secreto de los corazones y sus posibilidades de sufrir por mi amor. Yo les dejo la libertad de decir sí o no a la gracia que les visita.

Yo les doy más o menos según el grado de su generosidad.

Es una obra de amor y de redención. Todos están convidados a ella.

Alma pequeña, tu existencia debe consistir concretamente en vivir tu misión en el espíritu evangélico y en el abandono total a mi voluntad. En tu pena, mírame. En tu alegría, sonríeme. Confía y ama en mi Corazón.

Ha sonado la hora de la elección. Por un lado mis fieles. Por el otro, mis pobres hijos rebeldes. El trigo se separa de la cizaña. Es el tiempo de la cosecha, y todos serán conocidos por sus obras.

10 de junio de 1971. (H. 188).

 

J Tus más mínimos esfuerzos para complacerme quitan una espina a mi corona.

Pero, si careces de generosidad, añades una.

' ".

J  Yo soy la Verdad y la Vida. En Mi todo es verdad.

    Fuera de M í todo es mentira. La ostentación me desagrada.

22 de junio de 1971. (H. 189).

J Cree en el poder de mi Amor. Confía en él.

El Mensaje, en efecto, prolonga y profundiza la acción teresiana en las almas.

25 de junio de 1971. (H. 189).

J El instrumento no puede nada sin el artesano. Yo soy el gran Artesano que, de nada, crea una obra de arte. Esta obra es mi Obra de Amor, que llenará de alegría a los que la reciban con fe y reconozcan a su Autor.

24 de julio de 1971. (H. 190).

J Contigo, mi pequeño nada lleno de miserias, en el mundo entero consumiré las almas en la viva llama de mi divino Amor y confundiré a los orgullosos.

8deagosto de 1971. (H. 192).

J Sólo serán salvados aquellos que lo desean, así como todas las almas de buena voluntad, y yo les diré, en el juicio final: "Venid, benditos de mi Padre, para tomar posesión del Reino que os he preparado por el Sacrificio cruento de la Cruz".

4 de septiembre de 1971. (H. 193).

J ¿Quién es responsable del bien o del mal?

El alma es responsable del bien que posee en este sentido que su corazón se ha abierto espontánea- mente y voluntariamente bajo el soplo del Amor,. a la Verdad que le apremiaba.

El alma que no posee este bien valioso en ella, es responsable de su pérdida, porque rehúsa oír la voz suplicante del Amor que implora; y el Amor se calla en ella, porque está agobiado por las voces seductoras del vicio y de la corrupción que esclavizan el ser que creó para amar y que, por su culpa, sólo sabe ser infiel e ingrato. El Amor rebosa en aquel que ama.

El odio, la envidia están en aquel que me rechaza. ¿Dónde están la mansedumbre y la comprensión, sino en aquel que me ama?

¿ Dónde está el error sino en aquel que sólo se comprende a si mismo?

J Hija mía, eres feliz de sufrir estas injurias por mi amor.

Cuando me crucificaron, dije: "Padre, perdónales, pues no saben lo que hacen". Hija mía, lo que yo hice, hazlo tú también. Yo soy tu Maestro en amor y en misericordia. Tu corazón no puede contestar más que por el amor. Yo no te he enseñado otra cosa. Tesoros de gracia hay en ti, si pones en práctica las lecciones de tu Profesor de amor. Yo soy el Amor, y el Amor enseña el amor a las almas. El error, el odio, la envidia, sólo engendran error, odio y envidia. Acoge en tu corazón a los buenos y a los menos buenos. Dámelos TODOS, pues derramé mi Sangre por todos. Para cada uno y para mis verdugos, sólo tuve amor y misericordia. La Redención cuesta este precio.

Hijitos míos, expulsad de vuestros corazones estos sentimientos de amargura que vuestro Jesús conoce solamente por los ultrajes con que le abre- van aquellos que él vino a salvar y que no aceptan su Sacrificio. Vosotros, amados míos, sed amor en el Amor y consumíos en su llama.

5 de septiembre de 1971. (H. 197).

J  Tú eres un pequeño nada. Crece en sabiduría y en gracia, en generosidad y en amor.

M Tu pequeño instrumento, Señor, ha reproducido, como podía, el sonido de tu amor. Pero el Gran Artista que eres ha sacado de su torpeza unos acentos incomparables que resuenan hondamente en las almas y las encantan con su Perfección.

J   Es tan fácil decir "no" a la gracia, y tan difícil decir "sí" a las exigencias del amor.

14 de septiembre de 1971. (H. 198).

J   Buscan únicamente la Verdad, en lo que ella tiene de positivo para su amor propio. Ellos mismos son error, mentira y orgullo. Para los unos yo seré Dios y Padre; para los otros, Dios y justicia. Sin embargo, para todos soy Dios-Amor.

Ninguna alma es idéntica a otra. Cada una tiene su bien y su mal. Diferentes en todo, tienen, sin embargo, el mismo Padre y le rinden cuentas del bien y del mal. A todos doy la gracia de vencer al mal y de hacer el bien sirviendo a mi causa. Unos hijos se rebelan contra su Padre, que les ha colmado de gracias, y el Padre aguarda con     paciencia y está al acecho de un movimiento de arrepentimiento para perdonar. E I espera. Pero la llama de su amor los deja insensibles a su calor. Ellos rechazan la cruz que los salvó. Ellos reniegan los siglos de tradición. Destruyen el Amor Santo en las almas, lo pisotean hasta la muerte. y el alma sin Dios, esclava del mal, olvida que no es más que polvo, y que de este polvo he creado un ser de carne a mi Imagen. Han despedazado mi Cuerpo y llevado mi alma a la agonía. Hoy vuelvo a vivir esta agonía, centuplicada por la monstruosidad de sus iniquidades.

Hija, te doy a las almas. Ayuda a los desgraciados que buscan desesperadamente en ti el reflejo de su Dios. Recuerda a todos mi amor y mi dolor. Date a las almas totalmente, por Mí.

25 de septiembre de 1971.

J    Si me aman, que me sigan.

Lo que está en juego vale todos los sacrificios.

Esta Obra es, con mucho, la más importante. Asocia las almas a la Redención. Las confirma en la gracia y en la generosidad necesarias para sacar los frutos de vida para todos.

Lo que en este momento os parece primordial debe pasar al segundo plano, porque así lo quiero.

26 de septiembre de 1971. H. 200).

J Tu Dios está agonizando en las almas corrompidas. Resucita y resplandece en los corazones puros.

22 de octubre de 1971. (H. 201).

J   Si me amas, vivirás. Lo concreto de una vida, es amar con confianza y abandono.

J   Las almas se ganan por el amor, la mansedumbre y la comprensión. Si tú das amor a los demás, siempre te volverá algo, pues el amor atrae al amor. Aquel que se siente amado está cerca de la conversión.

Os lo digo, jamás daréis bastante amor a vuestro alrededor. Cada alma tiene derecho a vuestra solicitud. La Fuente pasa por vuestro corazón. Es inagotable.

1 de noviembre de 1971. (H. 202).

J   Pienso por vosotros, actúo en vosotros. Confiad en Mí. El Cordero se ofrece en vosotros. Comprended mi sed de amar y de ser amado.

4 de noviembre de 1971. (H. 203).

J   Os he mirado con cariño. He llamado a cada uno de vosotros por su nombre.

Como a unos apóstoles de los tiempos modernos, os he confiado una misión concreta.

Deseo vuestra generosidad, pero sin atentar contra vuestra libertad.

Noche del 8 al 9 de diciembre de 1971. (H. 206).

 

J   La Paloma ha construido su nido en el ápice del Edificio Sagrado 4.

25 de diciembre de 1971.

J   Sin principio, no hay continuación. El alma confiada lo es hasta la temeridad.

No se construye sobre la arena. Todo edificio debe tener sus cimientos.

No hay y no puede haber más que un solo pueblo, mi pueblo. Todos unidos por los lazos de una misma caridad. Un solo Pastor, un solo Rebaño.

Lo que conduce a Mí no puede dividir. La unión debe hacerse.

Nada de intereses personales, sino una sola y misma Causa. Nada de rivalidad entre mis hijos. Un solo corazón, una sola alma, al servicio del mismo Dios. Todos juntos, seréis fuertes con mi Fuerza, para vencer al enemigo. Divididos, sois débiles contra él.

Que acepte las ayudas benévolas que yo le mandaré, y los obreros no faltarán.

Para ser válido un testimonio debe darse a la luz del d ía.

Es tan fácil cerrar los ojos para no ver. Un cristiano digno de este nombre debe sufrir por su fe y no esconderla como si fuera una cosa vergonzosa.

El respeto humano paraliza toda acción virtuosa. Un cedro tiene raíces profundas; si no, no resistiría.

El movimiento de las almas pequeñas debe hundir las suyas en la Sede de la Cristiandad.

      Que despierte las conciencias anestesiadas por la locura del mundo   empobrecido en su fe.

     La Obra es el nacimiento de un común ideal, Obra grandiosa a la medida de   Aquel que la inspira.

     Hay que destruir en las almas a Mammón, este becerro de oro; este dios falso,   resplandeciente de una falsa gloria.  Conduce las almas al desastre.

   4 La Paloma: símbolo del Espíritu Santo; El Edificio Sagrado: la Iglesia; El ápice de   este edificio: el Papado, en él reside la Paloma